Aprender a distinguir entre la mente racional y la intuitiva.
Comprender que la mente racional sirve a la intuitiva y que ambas deben trabajar en equipo.
Cultivar y desarrollar las cualidades de una mente saludable.
Mejorar la atención en el momento presente.
Cultivar la concentración y la memoria.
Aprender a sostener una intención positiva.
Cultivar el discernimiento.
Estabilizar la mente y lograr la ecuanimidad.
Aprender a equilibrar la inteligencia, con la libertad y la voluntad.
Aprender a elaborar razonamientos irrebatibles.
Asimilar el arte de los decretos.
Aprender a crear deseos que vibren con nuestra esencia amorosa y sean realistas.
Distinguir el deseo de la fantasía.
Aprender a diseñar objetivos y disciplinas de éxito
Comprender la importancia de eliminar las resistencias internas, de cara a lograr que nuestros deseos se materialicen.
Aprender de los errores y generar aprendizajes significativos.
Eliminar de forma definitiva la rumiación mental (comerse el coco)
Mejorar el rendimiento mental disminuyendo el gasto energético.
Aprender a mover la conciencia por las distintas dimensiones de la personalidad (cuerpo, emociones, mente, relaciones y espíritu).
Recuperar la imaginación para activar las líneas de tiempo por las que deseamos transitar y realizar nuestros deseos
Lograr dominar la mente para que haga exactamente lo que nosotros queremos.